En la reducida lista de artistas legendarios de todos los tiempos, el nombre de Prince es infaltable tanto por su talento inigualable como por los resultados de todas sus producciones musicales.
Nacido un 7 de junio de 1958 bajo el nombre de Prince Rogers Nelson, no solamente delineó el sonido de Mineápolis, su ciudad natal, sino que también formó parte, junto a Madonna y Michael Jackson, de la tríada pop que gobernó el mundo en la década de los 80.
Tiene 39 álbumes de estudio en su haber, seis recopilatorios, cuatro en vivo y 13 EPs y, en vida, vendió más de 150 millones de discos, además de lograr un tendal robusto de premiaciones tales como siete Premios Grammy, un Globo de Oro, un Oscar por la banda sonora de Purple Rain (Albert Magnoli, 1984) y la inclusión en el Salón de la Fama del Rock and Roll.
Se sumergió en cuanto género musical quiso y se metió en el corazón de millones y millones de personas alrededor del mundo. Millones que, tras la noticia de la mañana del 21 de abril de 2016, lloraron su muerte producto de una sobredosis del analgésico fentanilo. A cinco años de su fallecimiento, todavía se siente el eco de este artista que, por lo alto de su calidad y lo vivo de su sentimiento, nunca deberían dejar de sonar.